jueves, 13 de septiembre de 2012

Canto a la patria


¿Quiénes son ustedes para juzgarme padres de la patria?
casualmente nací en los linderos de su finca
aquí mi ombligo, el de mi padre, el de mi madre
e imponen el nombre Guatemala sobre mi espalda

la patria es eso que se inventaron ustedes hace dos siglos
la bandera es un pedazo de tela que ondea,
sólo eso
el himno son cantos de guerra,
sólo eso
¿y les parece suficiente razón para mi sumisión?

qué culpa tengo yo de las líneas imaginarias y los colores en los mapas
al quetzal, a la monja blanca y la ceiba tampoco les avisaron nada
nos toca sin embargo pintarnos de azul y blanco cada septiembre
o en cada exponencial competencia de humillar al oponente

a mi no me define el mejor ron
ni la cerveza ni el pollo  
ni el azúcar ni la megapaca
no me representan once hombres tras un balón
ni me endulza el oído ningún american idol o trovador malafacha

tampoco me rijo bajo sus leyes
esto no es un contrato social
la constitución es un catecismo,
sólo eso  y nada más

mi dedo apunta a ustedes farsantes
han sostenido esta mentira en millones de actos cívicos
han esclavizado indios domesticado ladinos
se han atrevido a categorizar el color de nuestra piel y sangre
adscripción étnica para dividirnos distantes

siéntense ustedes en el banquillo de los acusados
esto es inaceptable
nosotras sabemos bien lo que es el orden
y quiénes han querido quebrantarle

tantas veces nos mataron, nos morimos y resucitamos
tantas veces desmembrados, torturados y nos seguimos alzando

son ustedes tan poquitos que todos caben en un solo latifundio
si tanta es su gana de jugar bancopoly y soldados
váyanse a vivir allí todos juntos
quizá mañana descubran oro en el subsuelo de su gueto VIP
que con cianuro laven su montaña y su agua
que en sus jardines siembren palma africana y así
vayan matándose unos a otros por meter droga en su nariz
hagan su Guatemala en una finca cafetalera
váyanse de una vez de aquí

aquí sólo queremos ser humanos
aquí sólo queda lugar para gritar justicia
aquí no hay perdón ni tolerancia ni reconciliación
ni democracia, esa injusta negociación
hay manos desenterrando huesos desamarrando manos atadas
voces reviviendo las palabras silenciadas

esto no es patria es cementerio
en cada sala familiar fotos de almas sin cuerpo
hoy cadavéricas  desparecidas encontradas
escupimos muerte sobre ustedes militares y oligarcas
nuestros versos jamás han quitado libertad a nadie
cuiden sus sueños cada noche llegaremos a visitarles

¿qué son ustedes piltrafas de la patria para atreverse a insultar a la poesía?
lo más bello que en su vida han creado es lo que defecan
jamás entenderían.

lunes, 10 de septiembre de 2012

(traspapelado del 2008)

Tengo un país atravesado
justo allí donde me fluye la sangre.
Duele cuando respiro y cuando trago.

Y los ovarios, sobre todo ellos, duelen como nunca.
El país que tengo atravesado
me ha bloqueado la entrada a la vagina.

Duelen los dedos cuando los muevo.
El país que tengo atravesado me destrozó las manos.
En mil pedazos. Astillas de huesos quedan.

Me sabe a centavo la sangre en mi boca.
El país que tengo atravesado
me ha mordido los labios,
me ha arrancado los incisivos.

Lo peor de todo fue perder la voz.
El país que tengo atravesado
se traga mis gritos.  No los deja salir.
Me retumban en la garganta hasta que me raspan.

No hay cura.
Simplemente no hay cura.
El país que tengo atravesado se niega a irse,
y yo a dejarlo ir.
Sin el país que tengo atravesado
me disminuiría el pulso.
Tengo que aprender a vivir con él
como todas hemos aprendido.
A dejarme llevar bailando tango con él.
Cada paso duele hasta la médula de cada hueso,
pero hay que seguir bailando.

Estoy vestida para la ocasión.

lunes, 3 de septiembre de 2012

cuando el humo no sale de tus labios


todos estos monumentos de concreto me dan ganas de llorar
porque no tienen vida
y yo me hundo en ellos a empeñar mi felicidad en créditos
desde que tuve un atisbo de lo que podría ser la partícula divina desintegrándose
cuando tu ombligo derramó su savia sobre el mío
pero duró, como diría mi hermano de soledades,
lo que duran dos peces de hielo en un güisqui on the rocks
apenas transito el final del primero de los deciles de mis quinientas noches


radiohead suena como el olor en tu cuello
me duelen las cuencas de los ojos conteniendo el berrinche de bebe sin teta
estos monumentos grises son tan frívolos
y yo anoche me emborraché sola con mi hermana la chavela,
hoy en la radio pusieron esa canción
y cómo te pienso
y cada vez que alguien te mira con ella y me cuenta
yo lloro
porque estúpidamente te imagino releyendo mis cartas
pensándome entre versos derramados en jazz
escuchándome en la radio

yo decidí seguir el camino hacia el centro de la concha y no ver atrás
refugiarme segura donde no me encontrara la frustración de saberme en tu vida a destiempo
debí haberte amado hace una muerte
reconocer tus ojos invitándome a seguir tu cola tras la entrada a tu madriguera
cerrar los ojos y masticar psilocibina

tú sabías desde el día que me conociste
que esta oportunidad era la nuestra
que quizá esta vez la guerra no iba a cobrar víctimas
y los hilos de tiempo rozaron
unieron las ramas de nuestros árboles
creciendo tantos años
tan cerquita
sin haber podido tocarse

prometiste amarme aunque no me sobrevivieras
 y decidiste morir antes que se me ocurriera matarte
prometiste no hacerme ningún daño que supieras
y sucede que las costillas se me partieron en dos y en medio quedó un barranco
quedó expuesto el estanque donde desembocan las ríos de aguas negras de mi sangre
soy rata
no se puede estar peor que en las cloacas y eso me tranquiliza
no puede haber nada más deplorable que esto

habito callejones aspirando recuerdos y pegamento
calentando mis manos congeladas por haber sostenido el sol
y soltarlo
llenando mis bolsillos de poemas que no importará si existen
porque no los vas a leer nunca
y vas a continuar viviendo como si hubiese sido valiente rendirnos
esperando que algún día Xibalbá vuelva a abrir sus puertas y volvamos a encontrarnos
creo que amarte fue necesario para aprender a soportar los funerales
guardar el duelo que merece lo que pudo haber sido
y quién sabe si algún día será

algún día todo esto habrá pasado
mañana quizás despierte con los ojos hinchados y maquillaré levemente
mi desamor con tonos primavera
hasta que eventualmente el invierno convoque tormenta eléctrica
luna llena o tristeza menstruante
mañana será otro lunes
y volveré a refugiarme en un monumento de concreto
llenando de óxido las calles y avenidas que me atraviesan
visitaré vitrinas
nada más
no compraré nada
la felicidad trae muchos disfraces y yo tengo miopía y astigmatismo
el brillo de los productos en las estanterías es falso
nada sacia el deseo
el amor no viene envuelto para regalo

veré sólo las vitrinas
usaré todos estos billetes para prenderme cigarros
uno tras otro
uno tras otro
dicen que cada uno son cinco minutos menos