lunes, 30 de enero de 2012

Después de tus visitas sorpresa

Tengo besos de cajeta
guardados en la lengua para cuando pueda dártelos
ojalá pudiera desnudarte también el cuerpo
y sorprenderte entrando por tu ombligo.

Será el coctel molotov de endorfinas
que me quedan estrellas en los ojos después de verte,
y a pesar que mi boca y lapicero
prefieran poesía sucia y realista
también quedo llenando mi cuaderno con versos cursis
escritos con las peor de las nostalgias.
Ojalá no existieran las convenciones sociales
que me obligan a aceptar que sos ajeno.

Aún no encuentro ninguna farmacia en esta zona
que prepare pastillas para evitarme esta mala costumbre de
soñar
que algún día nos encontramos a solas en la calle
y abordamos el mismo vagón del tranvía
que nos lleve en ruta corta para ir a ocupar terrenos baldíos
al barrio de la alegría.

Ya sé que te gusta ir por los tejados como gato sin dueño,
a mi también me provoca huir de mi cocina cuando está abandonada,
pero me gustaría tener más tiempo
para oler tu cuello y tocar tu oreja
cualquier estrategia que te retenga más de cinco minutos en mis manos,
hacerte ronronear como sé que puedo
y que durmás una noche que no acabe pronto
entre mis piernas.

En fin,
te digo que mi boca será dulce de leche
que seguiré guardando con mis pezones de azúcar
para deshacerse en la tuya.
Aquí en mi corazón voy a seguir reservando
parqueo para tu bicicleta.
Guardaré también
electricidad para el estéreo de mi pelvis
que musicalice nuestro próximo baile primitivo
del rocanrol de los idiotas.

mi primera publicación

Veo la revista
y aprieto las piernas
me siento cogida
por todos los ojos que me leen

jueves, 19 de enero de 2012

Se termina el juego



Eran las dos de la mañana, como ahora, cuando Ana abrió los ojos y decidió que ya era suficiente. Tantas veces había amenazado con irse, y ahora sabía que debía partir sin anunciar nada.
Anita dormía a su lado, con esa cara niña de inocente -que antes le encantaba- y que, ahora entendía, era sólo parte de su enfermedad. Odiaba más bien esa falsa inocencia de una mujer que se negaba a darse cuenta que ya había crecido. Esa aparente inocencia, que ahora detestaba con todas sus entrañas, era la máscara que esa mujer se había puesto para no asumir la responsabilidad de los corazones rotos que iba dejando en el camino.
La vio una vez más, la olió profundamente, la abrazo... y como sólo sintió asco se dio cuenta que el hechizo había terminado. Que por fin era libre y que podía irse sin sufrir demasiado por la abstinencia a esa respuesta hormonal - pasional que alguna vez hubo entre ellas.
Sin culpa y sin lástima se levantó de la cama y metió en su mochila solamente lo necesario para empezar nuevamente un viaje que físicamente la alejara de Anita lo más posible, y la llevara al centro de su propio cuerpo para darse cuenta que todo ese tiempo había estado ausente.
Arrancó una hoja de su cuaderno y escribió con letras grandes:

Me voy. Por fin soy libre.

Se quito el anillo del dedo anular, aquel que se pusieron una a la otra cuando todavía no se conocían, y lo dejó sobre la nota como pisapapeles.

Cerró la puerta tras de sí, y sintió una sonrisa enorme naciendo d
esde lo más profundo de su pecho.
-Que se joda- pensó -Ya me voy a encargar yo misma de encontrar otro infierno.

sábado, 14 de enero de 2012

triste mujer poeta

Parezco poeta triste.
Salgo con un cuaderno bajo el brazo,
y los labios rojos, a pesar de las ojeras malva.

Parezco mujer decepcionada.

La palabra amor la llevo marchita
disecada entre las páginas de este testamento
de triste mujer poeta
que no sabe llorar
sin derramar letras.

Perezco.

13 tijax

miércoles, 11 de enero de 2012

cuando empecé a sacar cosas de lo que fue nuestra casa

Cerrar las puertas.

Morir un poco.

"Cuando al punto final de los finales no le quedan dos puntos suspensivos"*

Sacar el corazón bajo la puerta.
No dejarlo atrás.

Llorar a chorros.
Llorar con los ojos abiertos.
Salir con la frente en alto.
Cerrar la puerta.
Cerrarla y no abrirla nunca.
Si hay que recordar: abrir la ventana.
No la puerta.
La puerta es ahora una tumba.
Taparla con ladrillos y cemento.
Colocarle una lápida y de vez en cuando irle a dejar flores.
Siento mucho tener que dejarte dentro.
Pronto iré a traer el resto de mis muertos.
Pero voy a traspasar la puerta.
Abrirla nunca.

Abrirla nunca.

martes, 3 de enero de 2012

tu/mi nombre

I

y primero fue mi nombre
-que no se olvide nunca-
y mi primer llanto se unió al llanto
de los pocos que me esperaban y de los que no.
y la paz de los recién nacidos
apenas fue sonrisa a medias para esas almas
que aunque dormían, no soñaban.
mi pequeño cuerpo con SU nombre
fue quizás consuelo,
seguramente distracción.

y apenas cayó seca la tripa de mi ombligo
me escondieron allí dentro SU semilla.
pero la regaron con llanto desesperado-de- tanto- buscar.
se inundó la cuenca de mi ombligo
con agua salobre de nostalgia.
tuve que darle cobijo a la semilla con mi sangre.

y me creciste, Rebeca Eunice, hacia adentro.
nadie se enteró nunca porque después del llanto vino el silencio.

mi pobre ombligo inundado de tristeza
apenas les mostró las raíces
del árbol que creció vientre adentro.

y los ojos ciegos de los adultos
creían que la miraban en las fotos
que inundaban la casa de los abuelitos.
y nunca supieron explicarnos porqué
la tía nunca llegaría para las navidades.

y yo tan pequeña con mis ojos grandes
frente a esa foto gigante en blanco y negro
hacía crecer mi árbol a su imagen y semejanza.
pero tal y como me habían en enseñado:
en silencio…

en silencio.

II

Me entregaron tu vida con tu nombre

Rebeca

me entregaron tu fantasma

sin cuerpo, sin tumba.

Tu alma en pena.

Tu cuerpo en llanto.


Rebeca Eunice me nombraron

para que tu nombre no dejara de pronunciarse nunca.

domingo, 1 de enero de 2012

tumba de agua

Una casa inundada.

Si esto fuera un sueño
y mi caminar por este muelle fuese una metáfora,
esta casa inundada
-a la que nunca me invitaste-
sería ese hacer consciente
que ni vos sos para mí
ni yo para ti.

Una casa inundada,
sin puertas ni ventanas
penetrada absoluta por el agua
sos tú.

Aquí donde dejaste memoria de tu vida,
no queda nada.
Ojalá pudiera decir lo mismo de la casa que te construí adentro.

Habrá que abrir las compuertas del maremoto de las causalidades
para que arrase con tu hogar en mi pecho.
Habrá que abrir las compuertas del llanto
para regar la tierra seca de mis labios.
Inundar con el mar de mis ojos,
por fin y para siempre,
la esquina de corazón muerto
que había estado guardando sólo para ti.

Flores.
Quiero flores para la tumba de agua
en que el lago ha decidido borrarte.

Flores
que con su efímera existencia
mueran también sobre tu olvido.

Flores de muerto
para mis pupilas,
que no se cierren,
que apenas es el penúltimo funeral.

(Quién sabe si podré llevar la sangre a la esquina muerta de mi corazón)

Flores.
La belleza nace para después morir.
Flores.

13 kan

viernes, 30 de diciembre de 2011

dulce muerte

Una muerte sobre la otra se me fueron acumulando en la piel.
Negándome a la ósmosis las dejé que me formaran
una máscara triste de llanto amarrado.

Transformación es el kemé en mi destino
anunciándome que vendrá cíclicamente
la Dulce Muerte a besarme las heridas.

Ponme la mano aquí Macorina, ponme la mano aquí,
ponme la mano aquí Macorina, ponme la mano aquí...


Me han helado los oídos tus anuncios en chillido llegándome detrás del cuello
clavándome tu chuchillo - rayo de doble filo
(negro noche
espejo ahumado)
abriéndome la armadura de costillas
mientras tus dedos de hueso
APRIETAN
mi corazón
que desborda borbotones de sangre
mientras contenés su pálpito
en la jaula de tu mano.

...tus senos carne de anón, tu boca una bendición de guanábana madura
y era bella tu cintura la misma de aquel danzón
caliente de aquel danzón

Dulce Muerte
beso de miel tu canción de cuna en mi oído
aroma jazmín de noche tu abrazo.
Disculpáme si te moja en su transcurso
el río sonoro de mis lágrimas.

Haceme el amor
ponéme la mano en la entrada húmeda de mi alma.
Tocá las cuerdas de mi guitarra.
Dulce Muerte... ponéme la mano aquí.

...después el amanecer que de mis brazos te lleva
y yo sin saber qué hacer de aquel olor a mujer...

Mi olor a mujer en tus dedos de hueso
Dulce Muerte
mi miel en tu mano.
Mis lágrimas después del orgasmo de tu danzón en mi pélvis,
no te vayás sin dejarme dormida.

11 aq'ab'al

jueves, 29 de diciembre de 2011

destino inexorable

El gran problema de este país en este momento,
es que los militares todos tienen una escupidera con el escudo de armas de una nación impuesta a pura sangre,
creado para que los hombres que se ufanan de ser blancos tengan un escenario de títeres pordioseros,
entre los cuales están los militares con sus escupideras.

Ni más ni menos que nos escupen en la cara.

El gorila se posará sobre el trono
a gusto y antojo de una masahualada atemorizada
ante este pan y circo de cadáveres en barrancos y manos cercenadas.

Escasos quince años nos separan de aquel simulacro perverso
de intentar firmar aquello que es infirmable,
porque esas cosas no se ponen en papel.
Se hacen.

Y nos escupieron.

Cayeron manos, brazos, cabezas,
lenguas, corazones, CORAZONES
por no ver nunca más un gorila sentado en el trono.
Y estúpidas manos prestaron sus dedos -imperdonables-
para marcar con sus ignorantes equis
al ungido por el santo designio de la mayoría absoluta
en esta misa hipócrita en la que todos comulgan sin siquiera conocer si existe un salvador
que se les meta en el sistema para hacerlos infelices y culposos de cualquier pensamiento, palabra, obra u omisión.

Por su culpa, por su culpa, por su gran culpa.

Por nuestra culpa, por nuestra culpa, por nuestra gran culpa.


10 i'q

martes, 27 de diciembre de 2011

mar

es un mar el secreto entre las piernas de toda sirena

sabe a mar en la lengua
que en su vaiven agita las mareas que se chocan lento

abiertas las caracolas con sus labios húmedos de mar
hacen el amor cuando se besan en cadencia de cadera,
una barca-pelvis navegando sobre la otra
para sentir la plenitud del océano.

marea contra marea hirviendo la sangre
haciendo cantar la garganta
y entre la boca espuma de mar compartida.

si la marea sigue agitándose,
profunda y tibia entre las caracolas,
se convoca un maremoto convulso
que derrama agua dulce entre las piernas.

y las sirenas cantan mientras se convierten en ola.
y se convierten en melodía al unísono
mientras se derraman en cascada sobre otra barca-pelvis.

y confían su cuerpo ungido en aroma de mujer
en una barca de brazos y pechos que sobreviven
y cierran los ojos para dormir y dejarse naufragar
en los desconocidos mares de otra sirena.

sábado, 17 de diciembre de 2011

conejita II

salta mi conejita
para tus orejitas
pegá tu colita a mi ombligo
que quiero amarrar mi cordón umbilical a tu cintura.

lleváme al mundo de las maravillas
por la vía láctea de tu piel-leche condensada.
entrelazá tus piernas a mi cintura
dejáme a mano tus pezones dulces-estrellas de azúcar.

dame tu lengua de fresa sobre mis labios
quiero pintar los tuyos con sabor a pétalos de rosa.

te prometo fluir infinito de amazonas
entre las mareas bravas de nuestros océanos.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

conejita

si has de seguir saltando que sea encima mío

lunes, 28 de noviembre de 2011

poetas de noche respirando a medias

Las narices tapadas
de las poetas a media noche
destapan los cajones prohibidos
para encontrar rotas figuritas de porcelana
que es todo lo que queda
de los lugares en que han construido su hogar.

pero no lloran ni se lamentan,
porque se han tapado la nariz para no sentir.
y con un trago de aguardiente
se calman los nudos que acuden a la garganta de cuando en cuando.

ven hacia el cielo pero no ven las estrellas,
y respiran puro tabaco para olvidar que están vivas.
se matan en pequeñas dosis
y sus cuerpos lo saben.
por eso tratan de escribir poesía de día
pero escriben nada más de mariposas y autos

y la poesía
-y no hay quien lo ponga en duda-
se hace de noche,
con dolor de noche,
revolcándose en el alquitrán
de lo que nunca será.

sábado, 29 de octubre de 2011

viajando

8 veces la carta del tarot
marcando un camino sin vuelta:
nunca más volveremos al mismo sitio.
aunque volvamos no seremos nosotras,
ni el camino será igual.
no son esas "líneas de expresión" ganadas por reir con ganas
ni esa pancita
en la que hemos invertido noches de males de amores.

las incertidumbres son otras,
las seguridades, son menos.

la mente tal vez no se gane nunca
pero el cuerpo se ha ido ganando.

este cuerpo que ha aguantado
días y noches tras días y noches.
este cuerpo que se ha entregado pleno
pero que ha entregado tan poco.
este cuerpo marcado con tinta y atravesado con acero
ataviado con piedras
purificado con hierbas y conjuros.
(es mío/y tuyo/ cuando se me da la gana)
cantará y llorará porque el camino sigue
gozará y gozará
porque es su instinto y aprendizaje
y caerá y caerá
porque la gravedad también existe.
y será cada vez más animal,
porque así me lo he propuesto.
y será cada vez más astral,
porque así lo reclaman mis ancestras.

pero será mío.
ni del mercado ni del amor romántico ni de dios

será, eso sí,
recinto de sudor y de gozo,
mapa del yo-infinito
lienzo de mano precisa y punzante.
testigo del tiempo,
manifiesto del tiempo.
mi casa, mi hogar
que arrastro como caracola.
mi templo, mi lugar sagrado.
envoltorio que inundo y rebaso.
trenza de memorias y luchas.
depositario de vidas pasadas y contingentes.

lo llamaré mío hasta que sea cierto,
lo llamaré mío hasta que sea mío.
respiraré hasta experimentar el intercambio químico del aire con mi sangre.
meditaré hasta sentir el choque de los neutrones juguetones.
y viviré como se debe vivir:
segundo a segundo,
momento a momento,
a pesar del mundo y sus mierdadas.

existo,
aunque consuma poco.
existo.
EXISTO

martes, 25 de octubre de 2011

no es un buen día para hacer poesía
después de haberte hecho una prueba de embarazo
porque estúpidamente estás botando las barreras que has levantado
nombrándote lesbiana.

no es un buen día porque te sentís culpable
y nunca has podido mentirle al papel.
porque también es mentira que todo lo aguanta.

tendrías que confesar que nada te da más miedo que sentirte habitada
no por su semen
sino por su espiritu.

si fueras honesta contigo misma y este puto cuaderno
aceptarías que te estás saboteando gruesamente.
te reprocharías haberle prendido lumbre al pecho
mientras te dormías entrelazada y hundida en su cama.
confirmarías el craso error de sentirte amarrada a su ombligo.
lamentarías esa seguridad de cerrar los ojos,
desnuda y caliente,
entre sus brazos.
odiarías reconocer su olor y su textura
casi perfectamente.

llorarías como lluvia,
al saberte penetrada
absoluta y total
sin defensas, sin armas, sin guerras.

te prometiste no volver a enamorarte nunca.
y menos aún de un hombre.

qué triste será esa noche en la que borrarás su nombre
cuando la sangre baje a gotas anunciando
que siempre sí ganó la luna,
y querrás el calor de su mano en tu vientre
para calmar el dolor de esa muerte que te visita,
-cuando tenés suerte-,
una vez al mes.

corre y va de nuevo

(me sentí presa dentro de los barrotes de la costumbre
caí

profundo

abismalmente

me reclamaron las gargantas profundas de la tierra.
Imposible creer que los dioses estuvieron alguna vez aquí.)

Ya no pasa el aire por la nariz.
MIERDA.
Me estoy jalando las utopías con un billete de a quetzal.
Una mastercard se encargó de picarlas.
Pongo otra vez esa canción de Sabina.
Nada en esta noche será inocente.

Caeré

rodaré

daré mil vueltas sin poder dormir,
el ruido de la mañana en la ciudad me encontrará con ojos centinelas

y vas a volver a ser ese podrido nombre
con sabor a resaca de cigarro.

sábado, 22 de octubre de 2011

e 12

llueve sobre mojado en la ciudad de guatemala
depresión-social-tropical
las llantas ruedan
l e n t o
sobre el asfalto mojado

ALERTA ROJA noticia de primera plana:
el país se está deshaciendo

foto roja para amarillistas moderados:
se partió la carretera

pero... el país está deshaciéndose constantemente,
y las venas partidas,
a pedazos.
los muertos ya no son noticia tampoco.

aquí todo sigue igual
las luz no ha cambiado dentro de los centros comerciales
las toallas se secan puerta adentro.
quizás altere nuestra rutina ese pedazo de barro en el tacón,
o ese chorro que amenaza desde los tejados a nuestros peinados

vivo la tragedia desde una oficina con calefacción
y sobre todo sequedad.
me tomo un té caliente para tragarme esta confortable indignación
de la que sólo percibo el frío.
y le pongo punto final a esta celebración de la indiferencia
desde la comodidad de una silla con ruedas.

viernes, 14 de octubre de 2011

13 kame

hoy en 13 kame
prendí velas y pom, con ocote
me acompañan las fotos de mis diosas,
el humo entre los cristales ahumados del tijax.

veniste como la muerte a darme azúcar en la boca
y tal vez porque mi corazón es de roca dura
me tallaste tus huellas de muerte-descanso.

frente a mi altar-hogar
nombro tu nombre
en una pequeña tinaja de barro
para que apenas te susurre mi llamada.

pasa el tiempo y no volvés.
y no me gusta esperar.
estoy recorriendo otros mapas con mis dedos
y estoy empezando ya a sembrar flores.

por eso espero que mi llamada te despierte
con su viento frío de xibalbá,
y me cruce en tu pensamiento,
desnuda y de noche,
y te decidás a mandar ese correo electrónico
que tanto he estado esperando.

miércoles, 12 de octubre de 2011

en el día de la raza (que le dicen)

Amanecí imaginando la alegría colectiva de nuestros cuerpos mestizos si hubiésemos crecido sin el cristianismo impuesto.
O si bailáramos en lugar de llorar una semana entera en pleno verano.
O si habláramos aún el lenguaje del agua sobre los troncos de árboles tropicales.
O si dejáramos fluir la espiral del tiempo que sale de nuestra frente.

Pero nacimos de un choque de pelvis bárbaro y salvaje
ofrendando la sangre que reclama esta tierra de cavernas profundas,
orando bajito a la serpiente en los pies de esa monumental virgen morena.

Y yo:
huelo a pom y a sangre india
danzo potente con la fuerza de las diosas negras en mi cadera
canto con voz gitana que acompaña el melodrama del continente.

Me expando en el cosmos con el sabor ácido de la psilocibina entre mis muelas
dejo flores, frutas y recuerdos a la diosa de las aguas para que me cure el mal de amores
he conocido el mundo por páginas amarillas con olor a tinta y plomo.

Soy híbrida
como la serpiente emplumada.
Tengo esencia de coco y carne de barro.
Y en las marcas de mis heridas tribales
llevo todas las maldiciones de la injusticia.

viernes, 7 de octubre de 2011

No soy poeta

No soy poeta.
Pero a veces transcribo esas conversaciones en la espalda de la luna
cuando paso a fumar un poco con la mulata de tal,
y jugamos a vestir enanas y domesticar osos,
y planeamos terremotos y erupciones.

No soy poeta.
Lo que pasa es que a veces las palabras asoman por la garganta
y pican sus texturas en el cielo de mi boca
y tengo esa sensación de vomitar conejitos que alguna vez describieron por carta a una señorita en paris.

No soy poeta.
Lo que pasa es que no sé qué hacer en las madrugadas
cuando el cuerpo dice que sí, pero la mente que no
y allí está la computadora con todas sus letras,
y una página virtual en blanco
dispuesta a escuchar mejor que nadie
las canciones de madrugada de mis dedos.

No soy poeta.
Sólo grito en una hoja de papel
cuando las lágrimas se quedan en la garganta
o cuando, por ejemplo,
prefiero maldecirte por escrito.

No soy poeta,
no lo soy.
Sólo, a veces, me indigesto con tanta cosa que considero mierda
y tengo vomitarla,
a pesar de mis buenos modales y costumbres,
públicamente en nombre de mi sanidad mental.

domingo, 18 de septiembre de 2011

domingo

No vale la pena contar el tiempo de destierro

aunque perfectamente sé que son 4 meses.

Sentada desde mi refugio, viendo la lluvia sobre el pavimento y los cables

recuerdo que es domingo.

Y que no estás.


Me cocino el almuerzo todos los días

ya no tengo con quién pelear por no hacerlo.

Lo mejor es poder ser vegetariana sin reproches.

Limpio la caja de la gata sin protestar a nadie,

veo películas aburridas sin pena,

escucho hip hop a todo volumen

me pongo tacones y falda corta.


Ya no encuentro ropa tirada por la casa,

ya no hay platos sucios en la cocina

ya no ordeno desastres.

Ya no despierto de madrugada por los escándalos de borrachos y prendidos

mi casa ya no es refugio para faltos de vida.


Me regocijo en esta libertad reconquistada.


Pero es domingo y estoy sola.

Y te recuerdo.

Y me hacen falta tus pies fríos en las piernas.

Y me hace falta contarte los laberintos imposibles de mis sueños.

Y te imagino desplomada por la resaca en alguna cama que no es la mía

y tengo la certeza que alguien más pasa sus dedos entre tu pelo

y que alguien más despierta tu olor a vainilla.

Y te extraño.


Pero no te quiero cerca.


Estás mejor en esa región donde sólo puedo suponer

donde sólo puedo ansiar, donde sólo puedo imaginar.

Si estuvieras aquí probablemente estos versos fueran lastimeros y odiantes

porque te odié. Sin dudas.

Me odié aún más a mi.

Y esa es mi ganancia en este juego de a perder.

Por fin puedo dormir sin despertar en pleno ataque de histeria

preguntándome porqué te sigo amando mientras jalás coca en mi mesa de centro.


…solamente muero los domingos, y los lunes ya me siento bien…

miércoles, 7 de septiembre de 2011

elecciones

nuestros sueños no caben en sus urnas
basuero de baño de día domingo
broshure de turismo para pobres de fe

domingo, 4 de septiembre de 2011

lo hemos encontrado en un charco de sangre
murió sólo
ella gritó...
yo entro en control
llamo, informo, aviso
y un nudo grande se me hace en los lagrimales
¿será que ya me acostumbré tanto a la muerte?
creo que fue al segundo funeral que decidí ya no dejarme afectar
o de ver tanta sangre y tanto muerto en la tele
esto ya no me impresiona

viernes, 2 de septiembre de 2011

animal

luz de luna tu espalda blanca me transforma en coyote
percibo tu esencia con mi nariz de noche

pierdo el control

me acerco para sentirte palpitar,
muerdo esos ojos de lechuza sobre tus alas,
te arranco pedacitos de piel para sentir tu sangre.
me excita sentirla hirviendo en tu cuello,
saboreo la humedad roja y metálica.

desgarro
arranco
mastico
te devoro

me dejo ser animal,
me abandono al instinto
me domina el instinto,
presa de mi presa
bajo la guardia y te dejo entrar

aunque te quiera comer prefiero convocar tu tormenta de vida.
ahora te como desde mi centro
te trago con ansias,
mi humedad absoluta se desborda
para dejarte marcas de mi fragancia

mamífera animal total salvaje e intensa
poseida penetrada lamida gozada
transitamos el extasis infinito del universo

desfallezco me caigo me desplomo,
dejo caer mi cadáver sobre tu cadáver palpitante.
hemos muerto y resucitado
lo sé porque respiro de nuevo
siento el caliente vaho de un olor nuevo
sudor sangre
vos lechuza
yo coyote.

hemos muerto
para despertar el nuevo aroma de esta selva
hemos muerto
para darle vida a estos monumentos de concreto
afuera
las gotas de lluvia caen desde los cables
adentro
lluevo

en el onomástico de mi amado padrecito

De cuántas imágenes está construida mi memoria
de cuántos hilos entretejida la trenza de mi vida
sólo lo saben las manos blancas de mi abuela
que además de tejer vestidos y flores
tejió para defender los rostros insumisos de la montaña
sólo lo sabe mi abuelo
maestro y artista de la palabra
sólo lo sabe mi padre en su ofrenda a la vida
depositando su esencia en el vientre de mi madre

me tejiste padre
un petate de conocimiento real y mágico como nuestra historia
me tejiste padre
una trenza de melodías rebeldes y hermosas
me tejiste padre
no esclava ni para tu servicio, me tejiste libre
me soplaste con tu aliento inconforme en la frente
para que de mi garganta se desenrollaran las palabras con las que protesto al mundo
las melodías que canto al mundo
la libertad con que navego

tejida te llevo en mi pecho
en tinta en mi piel
te ofrezco flores, imágenes y memorias, deconstrucciones y vida
no es un día cualquiera el día en que naciste