martes, 25 de octubre de 2011

corre y va de nuevo

(me sentí presa dentro de los barrotes de la costumbre
caí

profundo

abismalmente

me reclamaron las gargantas profundas de la tierra.
Imposible creer que los dioses estuvieron alguna vez aquí.)

Ya no pasa el aire por la nariz.
MIERDA.
Me estoy jalando las utopías con un billete de a quetzal.
Una mastercard se encargó de picarlas.
Pongo otra vez esa canción de Sabina.
Nada en esta noche será inocente.

Caeré

rodaré

daré mil vueltas sin poder dormir,
el ruido de la mañana en la ciudad me encontrará con ojos centinelas

y vas a volver a ser ese podrido nombre
con sabor a resaca de cigarro.

No hay comentarios: