jueves, 22 de marzo de 2012

No tengo nada que entregarte

Jamás le he puesto precio a mi libertad
pero insisten en querer comprarla.
No estoy dispuesta siquiera a negociarla.
Dicho eso,
tengo que contarte
que me gusta aprender por el camino del mal.
Que si la cosa no se pone intensa, me da hueva.
Que me erotiza el tacto de una piel marcada con tinta,
y las agujas me dan escalofríos en la cintura.
Que nací con siete muertes y apenas voy por la segunda.
Que a varios espíritus les gusta mi compañía.
Que lloro cuando algo me parece injusto,
y que mis lágrimas fluyen infinitas.
Que odio a la derecha
los militares
los que dicen indio
los que me nombran su mujer
el futbol de un continente distante
la autoridad
la gente que olvida que es animal
y los dogmas.
Si aún con las aclaraciones del caso
insistís en que te robe los besos
que no te duela cuando te diga – te lo dije
porque te lo estoy diciendo.

1 comentario:

S0y la Que No Buscas dijo...

Que no se queje, usted ya se lo dijo con anticipación.. jajaja
muy buen post

saludos!