lunes, 3 de septiembre de 2012

cuando el humo no sale de tus labios


todos estos monumentos de concreto me dan ganas de llorar
porque no tienen vida
y yo me hundo en ellos a empeñar mi felicidad en créditos
desde que tuve un atisbo de lo que podría ser la partícula divina desintegrándose
cuando tu ombligo derramó su savia sobre el mío
pero duró, como diría mi hermano de soledades,
lo que duran dos peces de hielo en un güisqui on the rocks
apenas transito el final del primero de los deciles de mis quinientas noches


radiohead suena como el olor en tu cuello
me duelen las cuencas de los ojos conteniendo el berrinche de bebe sin teta
estos monumentos grises son tan frívolos
y yo anoche me emborraché sola con mi hermana la chavela,
hoy en la radio pusieron esa canción
y cómo te pienso
y cada vez que alguien te mira con ella y me cuenta
yo lloro
porque estúpidamente te imagino releyendo mis cartas
pensándome entre versos derramados en jazz
escuchándome en la radio

yo decidí seguir el camino hacia el centro de la concha y no ver atrás
refugiarme segura donde no me encontrara la frustración de saberme en tu vida a destiempo
debí haberte amado hace una muerte
reconocer tus ojos invitándome a seguir tu cola tras la entrada a tu madriguera
cerrar los ojos y masticar psilocibina

tú sabías desde el día que me conociste
que esta oportunidad era la nuestra
que quizá esta vez la guerra no iba a cobrar víctimas
y los hilos de tiempo rozaron
unieron las ramas de nuestros árboles
creciendo tantos años
tan cerquita
sin haber podido tocarse

prometiste amarme aunque no me sobrevivieras
 y decidiste morir antes que se me ocurriera matarte
prometiste no hacerme ningún daño que supieras
y sucede que las costillas se me partieron en dos y en medio quedó un barranco
quedó expuesto el estanque donde desembocan las ríos de aguas negras de mi sangre
soy rata
no se puede estar peor que en las cloacas y eso me tranquiliza
no puede haber nada más deplorable que esto

habito callejones aspirando recuerdos y pegamento
calentando mis manos congeladas por haber sostenido el sol
y soltarlo
llenando mis bolsillos de poemas que no importará si existen
porque no los vas a leer nunca
y vas a continuar viviendo como si hubiese sido valiente rendirnos
esperando que algún día Xibalbá vuelva a abrir sus puertas y volvamos a encontrarnos
creo que amarte fue necesario para aprender a soportar los funerales
guardar el duelo que merece lo que pudo haber sido
y quién sabe si algún día será

algún día todo esto habrá pasado
mañana quizás despierte con los ojos hinchados y maquillaré levemente
mi desamor con tonos primavera
hasta que eventualmente el invierno convoque tormenta eléctrica
luna llena o tristeza menstruante
mañana será otro lunes
y volveré a refugiarme en un monumento de concreto
llenando de óxido las calles y avenidas que me atraviesan
visitaré vitrinas
nada más
no compraré nada
la felicidad trae muchos disfraces y yo tengo miopía y astigmatismo
el brillo de los productos en las estanterías es falso
nada sacia el deseo
el amor no viene envuelto para regalo

veré sólo las vitrinas
usaré todos estos billetes para prenderme cigarros
uno tras otro
uno tras otro
dicen que cada uno son cinco minutos menos

No hay comentarios: